Menos mal que tenemos el R.D.

Mi reflexión: Si el Protocolo Oficial no está peor es gracias al R.D. 2099/1983.  Digo esto porque constantemente estamos hablando de la necesaria actualización de éste. Confieso que yo era uno de ellos, digo era porque ahora mi reflexión es otra. Creo que antes de afrontar dicha actualización deberíamos estar preparados y sinceramente, teniendo en cuenta la casuística de las CCAA que defienden de forma acérrima su estructura, es difícil imaginar un nuevo R.D. que  pueda llegar a unificar criterios y finalmente, consolidar una disposición vertebradora del protocolo en nuestro país.

Otro aspecto importante es la selección de las personas responsables de llevar a buen puerto esta difícil tarea. Seamos conscientes que España, no está pasando por su mejor momento y esas discrepancias no deberían interferir en la evolución de un R.D. que necesita, no sé si ahora, de una evolución cualitativa y que sirva más para flexibilizar y lograr que en cada acto transcurra todo con normalidad; no pueden existir dificultades en su interpretación o un descontento impuesto por la necesidad imperiosa de mantener rangos de callo político; bastante tenemos, como dije en un anterior artículo, Politizando el Protocolo.

En mi modesta opinión me parece que menos mal que tenemos un R.D. porque estoy convencido que no seríamos capaces de lograr entendernos, entre otras cosas, no somos generosos y dudamos de la practicidad de la aplicación del protocolo, ya que, en algunos casos sucumbe,  a la contaminación de una carga política en nuestro hacer diario.

Un nuevo R.D. bien hecho, sería la salvación de la profesión; debe ser un árbol fuerte, y si se me permite la expresión, donde los profesionales podamos aferrarnos a sus ramas sin el temor de romperlas. La misión del R.D. no es solo la de ordenar, es la de ser, como dije antes, la columna vertebral donde se sustenta todo el protocolo.

Soy consciente de que ya hay trabajos y peticiones sobre este tema; yo pediría un amplio consenso, con una representación amplia, sin imposiciones políticas y si no se puede aplicar en su totalidad una visión clara de los principios de lo que es el protocolo, es mejor no tocar nada; menos mal que tenemos un R.D.

Javier Vila de Savenelle de Grandmaison

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.