Protocolo, ese incomprendido

Algunos de ustedes se preguntarán el por qué de este título; antes permítanme que haga dos breves reflexiones; la primera, que no suelo hacer ningún tipo de valoración negativa sobre artículos relacionados con mi profesión, excepto en este caso que requiere de alguna puntualización. La segunda, que respeto a las personas que son supersticiosas y no pretendo, con dichas imágenes, hacer valoración alguna; siempre han tenido mi comprensión.

Bajo el título “Comida de negocios: cómo no hacer el ridículo” *publicado en abc.es uno puede leer con tristeza, la interpretación errónea de lo que se entiende por Protocolo. Uno se encuentra esta hermosa perla, cito textualmente “Y es que las clases de protocolo están reservadas para grandes empresarios, políticos y gente de la nobleza”. Está claro que con esta afirmación uno se estremece al creer que en el siglo XXI podamos tener esta concepción de esta profesión; simple desconocimiento y la desagracia de no documentarse para hacer un artículo. Para algunos hablar de esto es una simple ñoñería y para otros hablamos del arte de hacer las cosas bien desde la discreción y el respeto a una buena planificación en su conjunto.

Les dejo  esta secuencia de imágenes y seguimos con el artículo. Como en dicho artículo habla de anécdotas divertidas y se permite dar algún consejo, y de estos últimos, habla de no dejar el bolso en suelo, sino de colgarlo. Permítanme esta broma, pero el Protocolo no es precisamente esto:

Que irónico soy, ¿verdad? Pero la desgracia de todo esto es que hay muchas personas que llevan años trabajando para “romper” esa visión frívola, rancia y carcomida de lo que es el Protocolo.

¿Por qué esta imagen? Porque si continuo con el ideario y los objetivos del artículo del ABC, seguro que hablaría del bolso que está en suelo, de su vestido, de sus guantes pero no me hablaría, por ejemplo, que podríamos haber escogido mejor el punto de foto para evitar que saliese el cámara detrás o la escenografía escogida, quienes son las personas que están en las escaleras, cómo están ordenados (presidencia). El Protocolo no es qué me pongo.

Foto histórica, ¿la recuerdan? Lady Tatcher deja el bolso en el suelo, ¿ese fue el titular? pues no; lo que quiero decir con todo esto es que no seamos superficiales; uno puede hablar de muchas cosas, faltaría más, pero uno debe informarse bien. Posiblemente, de lo que se habla en ese artículo es 10 % de lo que es esta profesión; tradiciones, normas, costumbres,  reglas, técnicas, planificación, escenografía….  Le invitaría a que asistiese a una clase de una titulación de protocolo y que pudiese descubrir las asignaturas que se estudian, además de conocer el perfil de los alumnos.

Debemos abrir la ventana para que entre aire fresco y que se marche ese olor rancio de la concepción de que todo es rígido. Somos flexibles, comprensibles y deseamos que la que gente sea natural.

Nota de interés:

Artículo de ABC: http://www.abc.es/20120320/local-cataluna/abci-comida-negocios-como-hacer-201203201317.html#.T2mtWFsMczw.twitter

Recomiendo: La lectura de los comentarios que aparecen después del artículo del ABC; bien argumentados.

Javier Vila de Savenelle de Grandmaison | Your Sitting

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