Siempre es muy delicado interpretar y valorar una imagen. Es difícil porque no vienen indexados a las imágenes, los criterios y argumentos por los cuales se ha tomado una determinada decisión. Intentaré con esta secuencia de imágenes, aportar mi opinión sobre los recibimientos.

Desde mi punto de vista, un saludo lo podríamos estructurar  en varias secuencias, los previos, el saludo en sí, el desenlace del mismo y la finalización de éste (saludo); todo esto, bien planificado,  hace que la visita tenga un buen comienzo. Soy consciente que la prensa juega un papel muy importante, entre otras cosas, el girarse para mirar hacia la cámara es algo antinatural en el saludo, donde el mirarse, es una de las gratitudes del saludo, ¿no creéis? Además el saludo, se prolonga más de lo habitual. Me gusta mirar a los ojos a la persona que le estrecho la mano y sobre todo, con firmeza; sin excedernos. Estos momentos son más para los medios.

Si observo la imagen, me hubiese gustado que estuviesen invertidos los puestos, ya que soy partidario de recibir así; me resulta más apropiado y es otra muestra de querer hacer una estancia a nuestro invitado, más considerada. Me trasmite en este caso, que el que visita La Moncloa es el Sr. Rajoy. Yo soy partidario de la cesión.

Con el Presidente del Perú, el Sr. Humala el planteamiento fue el mismo. Nos podríamos preguntar, ¿qué hicieron los anteriores presidentes españoles?  Los anteriores presidentes siguieron, mayoritariamente este planteamiento, salvo alguna excepción;  es cierto que es preferible, como en el caso del Sr. Rajoy, que mantengan un mismo criterio y no, estar cambiando, ya que el mensaje que estamos trasmitiendo es dar preferencias hacia determinadas personas.

Cuando el Presidente estuvo recientemente en Portugal, el Sr. Passos le recibió de esta forma; insisto, no quiero decir que nuestro Presidente se equivoca, tan sólo digo que me gusta más así. Otra de las características de nuestro Presidente, es mantener el brazo pegado al cuerpo, generalmente y esto se marca cuando ocupan ese lugar.

El Sr. Sarkozy sigue en general esta forma; en este caso con motivo de la visita de S.M. el Rey D. Juan Carlos. También he de decir que le visto utilizar los dos planteamientos y eso, a mi no me convence por lo que comentábamos; o con todos, o con ninguno.

Esta es una imagen clara donde el Presidente francés, invita al Sr. Barroso que se ponga a su derecha. Los anteriores presidentes franceses también han utilizado las dos opciones. Una vez más, los medios forman parte del saludo.

El Sr. Cameron utiliza el mismo criterio que empleamos en España y he podido comprobar que una de las excepciones fue con una vista de Lady Thatcher.

Uno siempre desea lo mejor para su invitado, quiere ser próximo rozando la aquiescencia pero está claro que no existe un criterio claramente aplicado por todos. Yo me inclino por invitarle a que se ponga a mi derecha; mejor ceder. Aunque implique algún gesto, como veíamos en la foto del Sr. Sarkozy. La naturalidad es otro de los puntos débiles de nuestros políticos europeos en el saludo; he de reconocer que una de las personas que más me gusta en el trato, en los códigos del saber estar y en la ejecución del saludo es el empleado por S.M. el Rey Don Juan Carlos; simplemente, impecable.

Estos son los pequeños detalles que hacen grandes las visitas.

Javier Vila de Savenelle de Grandmaisón